El adecuado enfoque, diagnóstico y sobre todo un tratamiento quirúrgico planeado en forma cuidados harán de esta enfermedad una entidad con posibilidad de solución.
Maniobras improvisadas y de índole desesperado de resección sin planear una alternativa reconstructiva harán que evolucione en forma más agresiva y con bajas chances de resolución futura.
El líneas generales las resecciones totales o parciales con empleo de colgajos o injertos hacen de esta grave enfermedad una dolencia con posible solución. La individualización del tratamiento es la clave.
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